Un año de subsidios por COVID-19: un gasto que frenó la pobreza


El Estado dominicano ha destinado un total de 133,066 millones de pesos para atenuar el impacto de una pandemia que tomó por sopresa al mundo. Hace un año el gobierno anunció la creación de dos ayudas: el Fondo de Asistencia Solidaria al Empleado (FASE) y Quédate en Casa.

La tendencia de ayudas gubernamentales fue regional, y para República Dominicana la aplicación de estos subsidios redujo el impacto del COVID-19 en los peores meses de la pandemia, entre marzo y mayo cuando la economía estaba prácticamente paralizada.

Las autoridades aseguran que esos programas sociales permitieron salvar a miles del desemplo y de la pobreza. El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Miguel Ceara Hatton, dijo la semana pasada que los programas de subsidios de emergencia evitaron que 752,395 personas no cayeran en la pobreza monetaria.

Agregó entonces que el programa FASE I cubrió el 73 % de las personas suspendidas entre marzo-julio en el sector privado formal, lo que contuvo el aumento del desempleo.

Programas mal focalizados

Pero no todos los programas resultaron efectivos. Al menos eso cree el actual gobierno. Un informe del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo indica que el programa Pa’ Ti, ya eliminado tuvo problemas de focalización y no fue tan efectivo en abordar la asistencia para los trabajadores independientes, que eran su objetivo.

Pa’ Ti estuvo activo entre junio y diciembre del año pasado y se entregaron subsidios por 7,420 millones de pesos entre sus beneficiarios, quienes debían ser trabajadores por cuenta propia.

Entre tanto, Quédate en Casa estuvo dirigido a beneficiarios identificados por la Comisión de Asuntos Sociales, quienes podían comprar bienes básicos con aportes personales que hacía el gobierno a través del Gabinete Social. A este subsidio se destinaron recursos por 76,264 millones de pesos por el tiempo que estuvo vigente, de marzo de 2020 hasta febrero de este año.

Por su parte, en el programa FASE en sus dos modalidades se gastaron 49,380 millones de pesos desde su creación el 25 de marzo del año pasado.

El subsidio FASE ha sido desmontado progresivamente: primero la modalidad 2, que era la que cubría parcialmente el salario de los trabajadores de empresas afectadas, que acabó en diciembre pasado. Mientras tanto, el FASE 1 se mantendrá hasta abril de este año, según acordó el gobierno dominicano.

El gasto que se otorgó representó más de un 10 % del presupuesto nacional del año pasado, un monto que presionó las finanzas públicas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *