La pandemia ocasionada por el coronavirus, causante de la enfermedad Covid-19, no sólo ha dejado hasta el momento más de 2,400 muertos en República Dominicana, sino que también ha sumido a miles de dominicanos en el pobreza.
El impacto de la COVID-19 ha aumentado la pobreza monetaria en el país. Ha causado que volúmenes importantes de personas pasaran de un nivel social a otro más bajo por el derrumbe de sus ingresos, según reseña el estudio “Covid-19 bajo la lupa”, publicado en noviembre pasado por el Ministerio de Economía, Planificación & Desarrollo (MEPyD).
Solo entre marzo y junio del 2020 la población considerada de clase media, que es la que recibe entre US$10 y US$50 al día, se redujo de 35 % a 29 % y la población con ingresos vulnerables o en situación de pobreza, cuyos ingresos son inferiores a los US$10, llegó a representar el 70 %.
Zonas más afectadas
Las personas que residen en las áreas urbanas han sido las más afectadas por la crisis de la COVID-19, siendo el Este y el Gran Santo Domingo donde se registran los mayores aumentos de pobreza, según el estudio.
Aunque la pobreza aumentó en todas las macroregiones, el mayor incremento se registró en el Este del país, donde pasó de 19.5 % a 31.7 %, para un aumento de 12.2%.
En el Gran Santo Domingo, compuesto por el Distrito Nacional y Santo Domingo y donde se focaliza la mayor proporción de población urbana, el crecimiento fue de 7.5%.
En la macrorregión Cibao Norte la pobreza aumentó 4.3 %. El incremento menos significativo se registró en el Sur, donde el aumento fue de 3.1%.
“Este comportamiento puede verse explicado por la dependencia de la agricultura y la ganadería, que ha sido un sector en el que no solo no ha disminuido el empleo, sino que ha aumentado durante la crisis. En las provincias Elías Piña y San Juan se han incrementado la exportación de sus cultivos orgánicos de aguacate y la producción de habichuelas y cebolla apoyada por las compras gubernamentales”, precisa el estudio respecto al Sur.