Por: Cristian Hidalgo
Es importante saber que en 1905 el peso dominicano (RD$) con relación al dólar, estaba RD$5.00/US$1.00; que 32 años más tarde (1937) el presidente Trujillo promulgó la ley 1259 que creó la moneda nacional, la cual circulaba a la par con el dólar, bajo los mismos estándares, requisitos y exigencias de acuñación que la moneda norteamericana.
En principio, el respaldo de nuestra moneda era el oro; por ello su leyenda "PESO ORO"; eso quiere decir que cada peso que circulaba en nuestras calles tenía un respaldo en oro en la misma proporción. Hoy día, aunque nuestros gobiernos no lo digan a la población, los billetes y monedas que circulan en nuestras calles, poseen un respaldo "FIDUCIARIO", es decir, que se fundamenta en la credibilidad que tenemos en el Estado dominicano.
En otras palabras y de manera llana, el peso dominicano no posee ningún valor, más allá del que usted cree que tiene. Nuestro Estado lo único que tiene son reservas internacionales en dólares (que nada tienen que ver con el respaldo a la moneda), actualmente ascendentes a unos US$15,600 millones, equivalentes a 6 meses de importaciones (el doble de las exigencias de los reguladores económicos).
Eso quiere decir, que debemos ya de ir cambiando la mentalidad de votar por RD$500 y un picapollo; de apoyar a alguien por "dame lo mío"; de llevar analfabetos funcionales a nuestro Congreso, solo porque son nuestros "amiguitos". Si llegase el momento en que el pueblo dominicano deje de confiar en el Estado y no creer en nuestra moneda, tendremos que elaborarla de cuproníquel con tantos gramos de oro como precise su denominación. Es decir, que al vender la moneda se obtengan los mismos recursos en especie o dólar, que lo que ella dice que vale.