REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Un desarrollador millonario aparentemente se suicidó días antes de responder a las acusaciones de su familia por fraude por al menos $50 millones de dólares.
Peter Wei, de 66 años, murió el 10 de octubre, dijeron sus abogados en un tribunal de Florida, donde su hermano Tony presentó una demanda en junio, debido a las pérdidas monetarias de la familia por un edificio en Nueva York.
Según The New York Post, Wei debía responder la demanda el 14 de octubre, pero se suicidó en su departamento en Miami, reportó la Policía de esa ciudad.
La familia del empresario vive en Brasil y le confiaron la compra de un edificio en Bajo Manhattan, en el 116 de St. John.
Esa transacción ocurrió en 1980, lo que implicó el desembolso de $4 millones de dólares, pero en 2010 el millonario se asoció con desarrollador Nathan Berman, a fin de transformar el inmueble y ofrecer departamentos de lujo, lo que disparó su valor a $200 millones de dólares.
Como el dinero no era totalmente suyo, el empresario debía depositar ganancias en un fideicomiso familiar para sus padres Daniel y Emily y sus hijos, Peter y Antonio, pero no lo hizo.
El empresario fue acusado por ello de fraude, pero decidió quitarse la vida.
Se desconocen detalles de cómo se repartiran los bienes
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