Históricamente, fechas como Semana Santa y el período de festividades navideñas y fin de año que se acerca, marcan picos al medir la cantidad de accidentes en autopistas, calles y carreteras del país, los cuales cada vez más involucran a motoristas.
El director del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), Milton Morrison, calificó los accidentes viales como "una epidemia", afirmando que el país registró más de 3,000 fallecimientos por esta causa en este año 2024, el 70 % corresponde a motociclistas, unas 2,100 personas.
En los últimos cinco años, entre el 80 al 85 % de los pacientes que son atendidos en la Emergencia del Hospital Traumatológico Juan Bosch, en La Vega, se trata de pacientes heridos en accidentes de tránsito, y de estos, más del 70 % iban a bordo de una motocicleta.
De enero a octubre de 2024, el hospital recibió a 1,710 accidentados, de los cuales, 1,188 eran motoristas (70 % del total). Estas cifras no distan de años anteriores, cuando en 2023, de 1,830 pacientes, unos 1,823 andaban en motor a la hora del accidente. En 2022, el 91 % (1,058 personas de 1,151) fueron accidentados en motocicletas.
Enmanuel Corniel, médico emergenciólogo de este centro sanitario, destacó que "ninguno andaba con casco".
"No ha variado la estadística desde el 1991″, afirmó el doctor César Roque, director del Hospital Darío Contreras, al señalar que año tras año los motoristas encabezan la lista de accidentados en los traumatológicos del país.
De acuerdo con el ortopeda, semanas antes de la entrada de diciembre ya empieza a aumentar el volumen de accidentes, pasando de 160 atenciones diarias en Emergencia a más de 200 y más de 1,000 radiografías diarias.
"Son muchachos jóvenes, de 15 a 30 años, en motores del 60 al 65 %, no es tanto la dichosa patana", detalló el galeno.
Roque dijo que domingo y lunes son los días más ajetreados, activándose la Emergencia "a partir de las 10:00 de la noche y sin parar. El 80 % de los pacientes viene en altas horas de la noche, sin casco, sin papeles, bebiendo".
Testimonio
Hace diez años, Jefferson Argenis trabajaba como delivery en un restaurante ubicado en la avenida Winston Churchill. Ante falta de personal, recibió un llamado de su jefe para que trabajara en su día de descanso, pedido al que el joven accedió.
Mientras llevaba uno de los pedidos, un chofer de transporte público realizó una maniobra para rebasar a otro carro, rozando el motor de Jefferson. El problema no fue el impacto, sino que, al perder el balance, el motor le cayó encima de su pierna izquierda, aplastándola contra el contén y partiéndola en tres partes.
El joven fue sometido a cirugía y tras un año y medio en cama pudo empezar a caminar, venciendo todo pronóstico. "Cuando me vi el pie enganchado de un hilito del hueso creía que había perdido la pierna para siempre", comentó.
Hoy día, Jefferson se gana la vida llevando pasajeros en una parada de motoconchos y mediante aplicaciones digitales. Está contemplando someterse a una nueva cirugía en el tobillo, ya que nunca volvió a caminar con normalidad.
"El motor es mi medio de vida, no lo puedo dejar", afirmó el padre de dos.
En el caso del Ney Arias, las cifras rondan entre 150 mil y 250 mil pesos, a un paciente que se le coloca un clavo, una placa o se le hace cualquier tipo de cirugía de miembros superiores e inferiores. "Claro está, los pacientes que van al área de intensivo, el gasto se dispara", acotó Landrón.
Refuerzan personal
Por su lado, el director del Hospital Ney Arias Lora, Julio Landrón, afirmó que estos pacientes presentan importantes lesiones craneoencefálicas, de columna, de miembros superiores e inferiores.
"La mayoría son pacientes de motocicletas", comentó.
Al igual que sucede en el Darío Contreras, la Emergencia del Ney, que de lunes a viernes maneja entre 80 y 100 pacientes, recibe unos 150 pacientes en esta época festiva y por encima de los 250 los fines de semana.
"Hemos tenido que reforzar los fines de semana y tener más médicos de emergenciología, más médicos cirujanos, anestesiólogos, ortopedistas que puedan dar una respuesta rápida a estos pacientes y preservar la vida", añadió Landrón.
Llamado a la prudencia
Tanto el doctor Corniel, Roque y Landrón hicieron un llamado a la prudencia y pidieron a los ciudadanos respetar las señales de tránsito, a no consumir alcohol si va a conducir, usar cinturón de seguridad, casco protector y no textear al frente del volante.
