Alcanzando sus precios más altos desde el año 2013, el maíz y el sorgo, dos de las principales materias primas para alimentar los cerdos, los pollos y fabricar otros comestibles básicos y esenciales en la dieta de gran parte del mundo, registraron alzas internacionales entre el 66,7 y 86,5 % en abril de este año, con relación al 2020.
De acuerdo al índice de los precios de los cereales publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la presión al alza resultante de la intención de sembrar una superficie más reducida de lo previsto en los Estados Unidos de América y las preocupaciones por las condiciones de los cultivos en la Argentina, el Brasil y los Estados Unidos de América hicieron que los precios del maíz subieran un 5,7 % en abril.
Otros factores que motivaron la subida del cereal, es la escasez general de suministros de maíz, sumada a una fuerte demanda sostenida, lo que provocó que los precios del maíz se situaran un 66,7 % por encima de sus valores de hace un año y se mantienen en su nivel más elevado desde mediados de 2013.
En lo que respecta a otros cereales secundarios, la FAO advierte en un informe publicado en un página web, que los precios internacionales de la cebada y el sorgo siguieron bajando, con descensos del 1,2 % y el 1,0 % en abril, pero se mantuvieron un 26,8 % y un 86,5 % por encima de los respectivos valores registrados en el mismo mes del año pasado.