La cantante y compositora Flor Amargo entró al metro de la Ciudad de México para cantar, como suele hacerlo en todos los lugares que visita, pero fue detenida por una policía en la estación Hidalgo.
Días antes de dar un concierto en el Teatro Metropolitan, Emma Mayte Carballo Hernández, conocida como Flor Amargo, acudió al metro cerca de las 13:30 horas al metro para dar un show improvisado a la gente que viaja en ese transporte.
“Estoy muy contenta de que por fin, después de tanto tiempo, ‘Del metro al Metropolitan’, dirigido por Paco Chintro, que no va a perder el toque urbano pero como no va a perder el toque urbano voy a tener que cantar una canción motivacional en el vagón de la felicidad”, dijo la cantante antes de comenzar a cantar.
Su show improvisado era grabado por un acompañante que viajaba con ella. El fragmento del video fue compartido en redes sociales, ahí se puede ver el momento en que se la lleva una policía. Flor Amargo comenzaba a cantar su tema “Tiempo” cuando una elemento de seguridad del metro la interrumpió.
“Señorita, no puede venir cantando y me va tener que acompañar al Juzgado Civil". le dijo la policía. La cantante se mostró sorprendida, pero reaccionó de inmediato y preguntó a los pasajeros del vagón si ellos querían que se fuera. Para su ventaja, las puertas del metro cerraron en ese momento y ella aprovechó para retomar la canción que estaba interpretando a capela. La gente, divertida por su actitud, la apoyó y aplaudió para animarla.
Vídeo: Flor Amargo es detenida por cantar en vagón de metro
Pero en cuanto llegaron a la siguiente estación, la policía le ordenó que la acompañara y descendiera del metro. “No estábamos haciendo nada. Amigos, recuerden, el arte urbano es de todos”, gritó Flor Amargo divertida por la situación. Fue escoltada hasta las escaleras y ahí volvió a comenzar a cantar mientras uno de sus acompañantes hablaba con la agente.
Horas después, la compositora subió un video a su cuenta de Twitter explicando que el metro de la Ciudad de México siempre la ha apoyado. “Así que no se alarmen, no pasa nada. La oficial que estaba ahí me conocía, todos en el vagón me pedían fotos y por eso grabamos ese instante, porque era curioso que la oficial también me conocía. Y fue una broma. Me acordé de mis viejas épocas cuando me llevaban de la calle”.