SANTO DOMINGO.– La imputada Rossy Maybelline Guzmán Sánchez, quien figura como una de las principales acusada del entramado llamado “Operación Coral” es propietaria del inmueble: apartamento 3-A, del residencial J&J-II, el cual está valorado aproximadamente en un millón quinientos ochenta y cuatro mil pesos RD$1,584,000.00, según la Dirección General de Impuestos Internos (DGII).
Dicho apartamento está ubicado en la calle 12, esquina 15, Villa Axira, Las Caobas, Santo Domingo Oeste, Santo Domingo, registrado con el No. 076400424789, titulo 2007-1503, parcela 56-B-1-A-006.9780, DC 3.
Supuestamente la pastora Guzmán Sánchez, también es propietario de los siguientes vehículos:
- Toyota 4 Runner-SRS año 2004
- Toyota Corolla DX año 1997
- Mitsubishi Montero 4×4 año 2001
- Toyota 4 Runner SRS año 2007
- Nissan año 2003
La imputada Guzmán Sánchez, de acuerdo al Ministerio Público, registra unas catorce transacciones en efectivo que ascienden a la suma de diez millones cuatrocientos setenta y nueve mil con doscientos setenta y cinco pesos dominicanos y setenta centavos (DOP$10,479,275.70), operaciones reportadas en el período comprendido entre los años 2006-2019.
La cuenta de ahorros No. 5800560359 del Banco de Reservas a nombre de imputada Guzmán Sánchez, fue otorgada en fecha 13 de julio del año 2015, con estatus activa.
Los movimientos fueron recibidos desde el 24 de agosto del año 2015 hasta el 08 de febrero del año 2021, durante este período registró créditos por un monto total de tres millones setecientos cuatro mil novecientos diecinueve pesos con seis centavos (D0P$3,704,919.06), mientras que los débitos fueron por tres millones seiscientos setenta y un mil quinientos cuarenta y ocho pesos con treinta y dos centavos RD$3,671,548.32.
Al verificar las informaciones financieras por año, supuestamente no existe una correlación entre su perfil económico personal, con el relacionado a las empresas Único Real State e Inversiones S.R.L y la Asociación Campesina Madre Tierra, las cuales tuvieron movimientos bancarios de cientos de millones de pesos en solo cinco años, además de la adquisición constante de bienes muebles e inmuebles por dichas personas morales.