Santo Domingo.– Joan Rojas, padre de la bebé de dos meses fallecida en la Maternidad San Lorenzo de Los Mina, manifestó su indignación tras conocer el comunicado emitido por el Servicio Nacional de Salud, asegurando que “las cosas no fueron como dicen” y que el centro actuó con descuido, mala práctica y total indiferencia frente a la condición de la niña.
Rojas afirmó que la bebé ingresó con un cuadro leve de gripe y dificultad respiratoria, pero que durante su estadía “la situación empeoró hasta quitarle la vida”. Según su relato, en menos de 24 horas murieron tres niños en el mismo centro, lo que calificó como “alarmante y doloroso”.
“Mi niña estaba sana, solo tenía una gripecita. En mi casa bebía cuatro onzas de leche y lactaba normal. Llegó gordita, fuerte, y salió flaquita, pálida, sin comer. Solo se la pasaban sacándole sangre”, denunció.
El padre sostiene que la bebé de dos meses, permaneció nueve días en cuidados intensivos y luego fue trasladada a una habitación donde, según él, se descuidaron los monitoreos. Asegura que la noche en que la bebé falleció el monitor fue apagado por personal de enfermería.
“Mi esposa llevaba 15 días ahí sin salir, pendiente al monitor porque de ahí veía cómo estaba la bebé. Esa madrugada le apagaron el monitor dizque porque la bulla molestaba. Se durmió de cansancio y cuando despertó, la niña estaba fallando y el monitor seguía apagado”, dijo.
“Ahí no se pueden llevar muchachos”
El padre manifestó que el trato del personal médico fue inhumano y que incluso, horas antes de la muerte de su hija, el hospital le había entregado un cheque de 7,500 pesos para cubrir exámenes externos, el cual posteriormente le exigieron devolver cuando la bebé falleció.
Rojas denunció irregularidades en el manejo de ese dinero:
“Lo primero que me dijeron cuando murió mi niña fue que tenía que entregar el cheque. No estaban pendientes a la niña, estaban pendientes al dinero. No querían recibirlo si no era sin foto, como evidencia. Ellos manejan todo así”.
El entrevistado dijo que no tiene recursos para emprender acciones legales, pero pide que las autoridades intervengan: “Yo soy ayudante de construcción, no tengo fuerza ni un peso. Si pudiera poner una demanda, ya la hubiera puesto. Solo quiero que investiguen, porque ahí ponen a gente aprendiendo. Esos son aprendices los que atienden ahí”.
Impacto emocional
Rojas relató que la madre de la bebé se encuentra en estado de shock, con pensamientos suicidas y secuelas emocionales severas tras permanecer 15 días en el hospital “sin comer, sin dormir y prácticamente viviendo en el piso para estar junto a su hija”.
“Esa mujer se quería matar. ¿Cómo va a estar bien alguien que ve morir a su hija así?”
El padre concluyó pidiendo que nadie más pase por la misma situación:
“Lo único que digo es que ahí no se pueden llevar muchachos. Ojalá alguien haga algo”.
Hasta el momento, el hospital mantiene la versión oficial dada en su comunicado, mientras los familiares esperan que el Ministerio Público y las autoridades de salud profundicen las investigaciones.

