El político, nacido en un hogar de un dirigente de larga data, consumó la victoria que le avizoraban las encuestas más reconocidas y lleva al poder al Partido Revolucionario Moderno (PRM), formado en el 2014 con la salida de una mayoría de dirigentes y militantes del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), y teniendo como base la Alianza Social Dominicana (ASD) que mantuvo su padre José Rafael Abinader.
Abinader llega al Poder Ejecutivo en un momento difícil para la economía y la salud del país, que sufre un aumento significativo de contagios de COVID-19 y los hospitales y clínicas se llenan de pacientes que padecen del virus.
Tuvo que pasar, junto con los demás candidatos, por una inaudita campaña electoral que cambió desde que se frustraron las elecciones municipales del 16 de febrero por el colapso del voto automatizado.
Al inicio de la pandemia estuvo confinado en su hogar pasadas las elecciones municipales del 15 de marzo en las que su partido ganó las principales plazas, luego desplegó una “Ruta solidaria” en la que recorrió el país entregando alimentos y que lo llevó a convertirse en una víctima más del COVID-19 sacándolo de circulación en las últimas tres semanas de proselitismo, creando muchas conjeturas sobre el destino final de su candidatura.
Todo indica que todos esos obstáculos se convirtieron en impulsos su favor.
Muchos sectores apuestan a que el país nuevamente será confinado y se volverá al toque de queda en común acuerdo entre las autoridades electas y las actuales.
Es economista y su experiencia en el Estado la tuvo en el Consejo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) en el Gobierno del expresidente Hipólito Mejía.
Al presidente electo le aguardan importantes retos por el duro golpe que ha sufrido la producción y los miles de empleos que se han perdido y no se recuperan debido al cierre de la economía en los últimos 3 meses de confinamiento y pandemia.
Su equipo económico ha manifestado que por la lesión que han sufrido los sectores productivos se tendrán que acudir al crédito de organismos internacionales para buscar un relanzamiento de la economía a finales de año.
En lo adelante, Abinader deberá tener la sagacidad para unificar a todos los sectores del país en torno a una agenda de recuperación, pero previo a ello se tendrá que tomar medidas y hacer grandes esfuerzos para frenar y reducir la ola de contagios del coronavirus, que se ha disparado en las últimas semanas tras las fases de apertura de la economía
Sus inicios políticos
El proyecto presidencial de Abinader viene de 12 años de trabajos políticos que tuvieron como base e inició su precandidatura a senador de la provincia Santo Domingo en el 2005.
Fue elegido vicepresidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en la Convención Nacional del año 2005.
Fue candidato a la vicepresidencia de la República Dominicana en las elecciones de mayo de 2012 por el PRD, acompañando al expresidente
Hipólito Mejía
En 2014 fue proclamado candidato presidencial del Partido Humanista Dominicano y en abril de 2015 fue escogido candidato presidencial por el PRM en la XVII Convención Ana María Acevedo, obtuvo el 70.24 por ciento de un total de 315 mil 082 votos validos emitidos.
Fue el candidato a la presidencia de la República del PRM para las elecciones generales de 2016, donde obtuvo un 34.98% en alianza con el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Dominicanos por el Cambio, Frente Amplio y el Partido Humanista Dominicano.
El 6 de octubre de 2019 fue revalidado nuevamente como candidato presidencial del PRM, obtuvo 283,163 (74.10%) frente a Hipólito Mejía que logró 80,934 (21.18%).