"Él venía bajando de donde la novia y esos dos guardias lo interceptaron en el camino y sin mediar palabra le dieron un tiro", explica el padre de Yleanel Díaz, un joven de 21 años que el jueves por la noche fue llevado al hospital luego de que dos hombres, vestidos de policías y con armas largas, le dispararan a quema ropa.
Los disparos recibidos afectaron sus pulmones y riñones, poniendo en riesgo su vida.
Según las declaraciones de Alexander Díaz, padre de la víctima, Yleanel "es un muchacho sociable, muy sociable, decente, del barrio, trabajador. Un chamaquito humilde". Una vez estuvo preso, pero fue por una redada, explica Alexander. "Trabaja en una fábrica, en una industria eléctrica", continuó.
El tiroteo
La noche del jueves 10 de abril, Yleanel había ido a casa de su novia, en el barrio Enriquillo de Herrera, en Santo Domingo Oeste. A las 12:00 a.m., emprendió el camino de vuelta a casa con su motor.
Según relata su padre, que habló con Yleanel y las personas que lo auxiliaron, dos hombres, supuestamente vestidos de guardias lo interceptaron en el camino y sin mediar palabra le dieron un tiro.
- Después de derribarlo, lo habrían dejado allí tirado, en el suelo, moribundo. "Le perforaron un pulmón y un riñón. La columna aún no se sabe cómo quedará", lamenta.
Tras el tiroteo, "él alcanzó a llamarme a mi celular. Y luego uno de los muchachos que lo recogió, porque eran dos muchachos que escucharon los disparos y fueron a socorrerlo, me lo contaron", confiesa Alexander.