Santiago. La suspensión de los servicios de agua potable y los problemas de turbidez se han agudizado en prácticamente todas las comunidades de la provincia de Santiago.
La problemática ha desatado las críticas de la población que ve con preocupación que en momentos que se requiere de higiene para enfrentar el coronavirus, carezcan del vital líquido. El sacerdote Carlos Santana, cura párroco de la iglesia Divino Niño del sector Villa Progreso, cuestionó que las autoridades de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) no se dejen sentir en este período de crisis.
“Nos insisten que nos lavemos las manos frecuentemente, porque hay sectores como el de Villa Progreso, en los que el agua no llega desde hace cuatro días. Hay sectores como el Centro de la Ciudad, donde no llega desde hace una semana, y hay sectores donde no llega nunca”, apuntó el sacerdote. Calificó como inadmisible la situación por la que están atravesando los santiaguenses por el precario servicio de agua potable.
“Ingeniero Silvio Durán, los santiaguenses exigimos una mejor gestión en el manejo de la distribución del agua potable.
Sabemos que no es posible proveer el abastecimiento constante de todos los sectores, pero, por favor, no nos deje cuatro y cinco días sin agua”, expresó Carlos Santana.
Sin embargo, la CORAASAN informó que el suministro de agua comenzará a regularizarse en la provincia a partir de esta semana. Héctor Jáquez, director de Acueductos, informó que desde ayer suplían las zonas que se vieron más afectadas, como son la carretera de Tamboril, Pontezuela, Dorado I y II, así como la carretera Don Pedro. También se suministrará a la zona sur y todos los sectores que circundan la avenida Yapur Dumit y la parte Oeste de la ciudad.
Explicó que a esto se le suma la falla de una de las bombas de impulsión que redujo en un 50% el procesamiento del acueducto Cibao Central (La Noriega). Aclaró que el sistema ya está normalizado y que el programa de distribución solo será por 24 horas.