El Buró Federal de Investigaciones (FBI) investiga de manera conjunta con la Policía de Miami lo que parecería una falsa alarma de bomba al Consulado General de la República Dominicana en esa ciudad, que se habría producido en la mañana de este martes.
De acuerdo a las instrucciones de las autoridades, el cónsul general, Jacobo Fernández, autorizó evacuar al personal de la sede diplomática, ubicada en el Centro Financiero de Brickell. La misma fue inspeccionada por oficiales del FBI y Policía de Miami con los equipos correspondientes.
Además, el tráfico se cerró temporalmente en las inmediaciones del edificio mientras que los empleados permanecieron algunas horas fuera del edificio hasta que las autoridades entendieron que no existía ningún peligro para el personal diplomático.
Durante el acontecimiento los empleados de la sede diplomática dominicana reaccionaron absortos y atemorizados ante el hecho, en se habrían realizadas dos llamadas amenazantes al lugar que indicaban una supuesta colocación de un artefacto explosivo.
También, al mismo momento en que se produjeron los hechos, según informaciones confirmadas a Listín Diario, “un vehículo estaba produciendo un pitido peculiar, lo que llamó la atención de las autoridades. Este se encontraba estacionado en el parqueo del edificio contiguo al Consulado”, según indicó la fuente.
El suceso fue informado al presidente dominicano, Luis Abinader y a través de la Cancillería de la República, lo que se enmarca también dentro de los protocolos para estos casos.
Se espera que en algunas horas se emitan declaraciones oficiales sobre este hecho registrado en la sede diplomática del gobierno dominicano en Brickell.
Pasadas las 1:30 de la tarde de este martes los empleados regresaron a sus puestos de trabajo sin mayores complicaciones.