Cuando una mujer duerme el consciente descansa y abre paso al inconsciente. En este lugar es donde se desarrollan los sueños y las fantasías. Es lo que se llama fase REM del sueño y es allí donde se producen los orgasmos mientras dormimos.
Esto sucede porque durante la etapa REM del sueño, el flujo sanguíneo aumenta hacia todos los órganos, en especial a los genitales y el cerebro lo interpreta como una excitación sexual. Sucede lo mismo que cuando se tiene una actividad sexual o se produce una excitación, pero en los sueños.
La perfecta y sofisticada relación cuerpo-mente, provoca una relajación profunda en el cerebro que no tiene durante el día por preocupaciones o actividades que producen estrés. A su vez, al estar dormidas, hay menos inhibición y menos restricción consciente.
El doctor Juan Manuel Serini señala que la conjugación de las fantasías y la interpretación cerebral de excitación sexual, originan los orgasmos durante el sueño. A su vez, remarca que la mujer puede despertarse durante el elevado placer que le produce el orgasmo.