El tema del aborto volvió a ser el centro de los debates sobre el proyecto de ley que modificaría el Código Penal durante las vistas públicas realizadas este viernes por la Cámara de Diputados para escuchar opiniones u observaciones sobre esa iniciativa.
Eso, a pesar de que existe un proyecto de ley especial que es estudiado por otra comisión para permitir las tres eximentes a fin de despenalizar el aborto y que también, tal y como hizo la salvedad, el presidente de la comisión permanente de Justicia, Alexis Jiménez, el proyecto de ley que reformaría el Código Penal no se fundamenta sobre el tema del aborto y contiene 412 artículos sobre diferentes tipos penales.
Expusieron este viernes juristas, doctores, feministas, cristianos a favor y en contra, representantes de partidos políticos y de organizaciones como Participación Ciudadana, el Colegio de Abogados de la República Dominicana, la Alianza Dominicana contra la Corrupción (Adocco) e incluso, el representante de la Organización de las Naciones Unidas en el país, cuya participación generó cuestionamientos.
La vista transcurrió entre aplausos y momentos que precisaron que el presidente de la comisión pidiera el respeto de todos los participantes en el salón de la Asamblea Nacional, debido a que se encontraban en la “Casa de la Democracia. Dijo que aunque el tema del aborto generaba muchas pasiones, les recordó que “todos somos dominicanos”.
Cada expositor tuvo entre 3 y 5 minutos para manifestar sus ideas y aunque unas 45 personas se inscribieron para presentar sus observaciones o planteamientos sobre el Código Penal, algunos al prolongarse la audiencia pública, decidieron dejar sus escritos ante la Comisión Permanente de Justicia.
Madre de “Esperancita”
La última en participar en la audiencia pública fue la señora Rosa Hernández, madre de Rosaura Almonte Hernández, conocida en el 2012, cuando falleció, como “Esperancita”.
Ella pidió a los diputados no seguir permitiendo que por una ley mueran más adolescentes y mujeres que, al estar en estado crítico, no pueden interrumpir sus embarazos.
Con lágrimas y palabras entrecortadas dijo que hoy su única hija tendría 25 años y que por ella, madre soltera, no tener condiciones económicas suficientes no pudo trasladarla fuera del país para le practicaran el aborto.
Recordó que su hija padecía de leucemia y lamentó que al personal de salud de entonces solo le preocupara preservar el embarazo y no la vida de su hija adolescente.
“Falleció el 17 de agosto y yo morí con ella… Si ustedes como padres tuvieran que enfrentarse al dilema de sus vidas ante un aborto, sufrir o ir a la cárcel, ¿qué harían? Yo estoy segura que no permitirían que sufrieran y harían todo lo posible porque se salvarán”, expresó.