Un secuestrador, que mantenía retenidas a cuatro personas en una vivienda del sector Los Rosales de Santo Domingo Este, murió este domingo durante la intervención de las unidades tácticas de la Policía Nacional, después de que el hombre matara de un disparo a un oficial a cargo de la liberación de los rehenes.
Así terminó la vida de Cristian Eugenio Medina Méndez, de 40 años. Todavía no se ha determinado si el hombre acabó con su vida luego de matar al agente policial y encerrarse en una habitación o resultó muerto por un disparo de las autoridades. El cadáver fue trasladado al Instituto de Ciencias Forenses (Inacif), donde se le practicará la autopsia.
Medina Méndez venía atribulado por una fuerte depresión, según contaron familiares y conocidos. Se había visto sin dinero y envuelto en problemas familiares y lo peor es que decidió ahogar sus penas en el alcohol.
"Las unidades tácticas llegaron y pudieron rescatar a cuatro personas, dos adultos y dos niños. El hombre se encerró en una habitación y se escuchó un disparo. Después de agotar el protocolo decidieron entrar y es ahí cuando uno de nuestros miembros perdió la vida, primer teniente Juan Mercedes Vázquez, miembro del equipo SWAT de la Policía Nacional", declaraba el portavoz de la Policía, Frank Félix Durán, al contar cómo se inició el operativo que duró por horas. Luego, los agentes policiales lanzaron bombas lacrimógenas a la residencia para provocar la salida del individuo, pero al entrar estaba muerto.
Sin embargo, en la familia no todos piensan que Medina Méndez decidiera terminar sus días de esa manera. Heidy Medina, hija de Cristian Eugenio Medina Méndez, cree que su padre no secuestró a nadie.
“Él estaba en un momento de depresión por problemas personales y económicos", dijo.
El detonante de la situación ocurrida el domingo, según cuenta la hija, tuvo dos momentos: una discusión con una sobrina y la llegada de la Policía. "Él si tuvo problema con una sobrina a la cual agarró y luego se tranquilizó, pero al ver a la Policía volvió y se alteró”, explicó.
Medina Méndez estaba armado. Para poder solucionar la situación, los agentes que respondieron al 911 llamaron a los SWAT de la Policía Nacional.
Una vez en el escenario, las unidades tácticas, “gracias a una pronta actuación, pudieron rescatar a cuatro personas, dos adultos y dos niños” que tenía retenidos el hombre, que tenía un arma corta calibre 9 milímetros, según los testigos.