Durante operativos de intervención conjunta, las autoridades clausuraron varios negocios, notificaron a otros de la posibilidad de cerrarlos y apresaron a decenas de personas por infringir la ley, afectando la seguridad y tranquilidad social.
De acuerdo a las informaciones suministradas por el programa de Control de Bebidas Alcohólicas (COBA) del Ministerio de Interior y Policía, durante el esfuerzo interinstitucional integrado por fuerzas mixtas, compuestas por miembros del Ministerio Público, la Policía Nacional, el Ministerio de Defensa (MIDE) y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), fueron fiscalizados unos 70 negocios nocturnos, entre los que figuran colmados, bares y liquor stores.
De esa cantidad, cinco negocios fueron cerrados; tres situados en el Gran Santo Domingo y los dos restantes en provincias del interior del país. En tanto que 24 establecimientos fueron notificados por infracciones menores a los fines de que regularicen su situación; de esa cantidad, 10 negocios están situados en el Gran Santo Domingo y 14 en el interior del país.
Según las informaciones oficiales, en los negocios intervenidos se encontraban menores de edad, máquinas tragamonedas y fue detectada la contaminación sónica; la ocupación ilegal de espacios públicos, la falta de señalización de seguridad y la ausencia de puertas de emergencia.
Los operativos simultáneos se realizaron en el Distrito Nacional, las provincias Santo Domingo, Duarte, Monseñor Nouel y Hato Mayor. Las fuerzas mixtas se hicieron acompañar de representantes del Ministerio Público, que notificaron a los propietarios o representantes de los comercios sobre las medidas tomadas.
También, durante la "operación Garantía de Paz", fueron detenidas varias personas que intentaron obstaculizar el trabajo de las autoridades y otras que fueron encontradas con sustancias prohibidas.
Operativos seguirán
Edwin Féliz, viceministro de Seguridad Interior, quien encabezó los operativos en el Distrito Nacional, aseguró que los mismos se realizarán de forma permanente con el objetivo de garantizar la seguridad en las zonas con mayores índices delictivos.
"El dominicano merece descansar y vivir tranquilo; los menores no pueden estar en lugares que no les están permitidos, y queremos que la ley se cumpla", expresó el funcionario.