Venezuela superó el año pasado los niveles de miseria presentes en Haití para convertirse en el país más pobre de América Latina y el segundo en el mundo después de Nigeria, reveló el martes un informe elaborado por tres de las universidades más prestigiosas del país petrolero.
El fenómeno se produce luego que la economía venezolana se contrajera sistemáticamente en más de dos dígitos en cada uno los últimos cinco años, llevando al país a perder más del 70 por ciento de su Producto Interno Bruto.
El colapso económico ha condenado al 96.2 por ciento de la población a caer por debajo de la línea de la pobreza y al 79.3 por ciento de la población a vivir en condiciones de pobreza extrema, revela la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida 2019-2020, desarrollada por la Universidad Católica Andrés Bello, la Universidad Central de Venezuela y la Universidad Simón Bolívar.
Y esto año la situación va a empeorar, advirtió el economista venezolano Orlando Ochoa.
“Sigue habiendo caída, tanto por el efecto del coronavirus como por las sanciones y todo el efecto del deterioro acumulado”, dijo Ochoa desde Caracas.
El informe advierte que ocho de cada diez venezolanos no ganan lo suficiente para cubrir la canasta diaria de alimentos, con el país registrando un ingreso diario promedio equivalente a 72 centavos de dólar.
Los problemas económicos de los venezolanos son adicionalmente incrementados por la hiperinflación y una pronunciada deficiencia en los servicios públicos, que condena a millones a padecer de un insuficiente suministro en el servicio eléctrico y de agua potable y en el de transporte.
El acelerado incremento de la pobreza extrema se produjo desde que el gobernante Nicolás Maduro asumió la presidencia en el 2013, saltando desde el nivel de 11.4 por ciento que registraba ese año a 20.6 por ciento en el 2014, 29.8 por ciento en el 2015, 50.8 por ciento en el 2016, 63.7 por ciento en el 2017, 76.5 por ciento en el 2018 y 79.30 por ciento en el 2019.
Además de Venezuela y Haití (que pasó al segundo lugar), otros países que se colocaron en el tramo de pobreza de la tabla incluyen Guatemala, Ecuador, Cuba, Bolivia y Colombia.
Nigeria y Venezuela ocuparon los primeros puestos en la tabla a nivel mundial, seguidos por Chad, Congo, Zimbabue, Yemen, Haití, Sudán y Camerún.
Aún cuando el colapso de la economía está empujando a millones de venezolanos al borde de la hambruna, el país cuenta con una infraestructura instalada que pudiera permitir una recuperación más rápida una vez que el país ponga sus cuentas en orden, opinó Ochoa.
“La economía de Venezuela se ha encogido pero podría volver a expandirse con rapidez porque cuenta con una infraestructura y una capacidad instalada que no tienen otros países”, dijo Ochoa. “Haití, por ejemplo, no tiene la estructura económica que tiene Venezuela, ni tiene los capitales que tienen los venezolanos en el exterior”.
Pero para recuperarse sería necesario que primero se produzca un cambio político, para poder reactivar la inversión en el país, agregó.